ayudar a otros, en nuestras vidas, hablar de Dios,
Hoy, se siente orgullosa del hombre en el que se ha convertido su hijo. Nunca se imaginó que el pasado rebelde y casanova llegaría a ser uno de sus mayores logros. Te presento a Eliana. En su niñez, sus padres frecuentaban mucho los centros espiritistas, dejando una huella eterna en ella. “Mis padres se relacionaban mucho con estos centros espiritistas, tanto que yo llegué a participar de rituales desde muy joven. Esto fue cuando me dijeron que yo tenía un ‘talento’, que era una médium desde nacimiento y tenía que prepararme para responder a mi llamado en el mundo espiritista. Pero mi familia era un desastre, con lo cual, más tarde, pude entender que era debido a las fuerzas negativas que trabajaban en nuestras vidas por los rituales en los que participábamos.”
A los 15 años de edad, Eliana se mudó a otro estado de Brasil donde conoció al hombre con el que casó más tarde. Comenzaron a salir juntos y ella empezó a asistir a una iglesia evangélica con sus padres.
“Era tan extraño pero era por este mismo tiempo que me mudé de casa cuando debería haberme envuelto mas en la iglesia espiritista como médium. En aquel entonces no lo sabía, pero aquella decisión de mudarme me salvó la vida.” Dice Eliana.
Mientras asistía a la iglesia evangélica, a pesar de hablar de Dios, ella nunca experimentó este tan llamado Dios Todopoderoso. “Mi vida era un problema después de otro. Guardaba rencores en contra de las personas a pesar de que, si me preguntaban si era cristiana, yo decía que sí. Poco después me casé con mi novio y cuando decidimos tener familia, los problemas aumentaron. ¡Perdí cuatro hijos! Me quedé embarazada ocho veces pero solo cuatro sobrevivieron. Los otros murieron porque nacieron prematuros. Sucedía una y otra vez y no entendía qué era lo que yo estaba haciendo de mal. Y para añadir al dolor, los que sobrevivieron, tenían problemas de salud. Su hijo fue un ejemplo perfecto. Siempre estaba enfermo. “¡Sufría de un asma muy malo y era alérgico a casi todo!”
Eso fue hasta que invitaron a Eliana al Centro de Ayuda UCKG, recién abierto en el estado donde ella estaba. Le pregunté acerca de la primera vez que había estado allí y dijo, “Participé de una sesión y pronto me sentí diferente. Participé de las oraciones de liberación y me di cuenta que me sentía más liviana de cuando había entrado. Fue como si me hubieran sacado una carga pesada de encima. Cada vez que venía me sentía más fuerte y mi vida comenzó a progresar. Poco a poco, me liberé de todos los espíritus negativos que hacían de mi vida un infierno. Fue, tan solo entonces, que yo me sentía lo suficientemente fuerte como para comenzar a trabajar en mi familia.”
Junior, el hijo de Eliana era, por este tiempo, un total mujeriego e inclusive escribió las palabras ‘Bad boy’ en su coche. Eliana le cuenta a IMA “yo me quedaba arrodillada hasta tarde, orando por el para que regresara a casa sano y salvo.”
Tratando de cambiar a su familia, Eliana participó de propósitos y en Campañas de fe pidiéndole a Dios que cambiara a su familia y hoy, debido a la gran transformación que tuvo lugar en el hogar de la familia Bezerra, ¡su hijo Junior fue transformado de tal manera que se ha dedicado totalmente a ayudar a otros en el Centro de Ayuda UCKG en el que, Eliana recibió ayuda!’
Hoy, la familia Bezerra creen en una cosa; ¡todo es posible mediante una simple actitud de fe!
Eliana Bezerra
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