difícil de controlar, incapaz de reaccionar, SEMANA DE LA INDIGNACIÓN,
¿Qué exige la INDIGNACIÓN? Simple, ¡una RESPUESTA!
Es un proceso, o sea, nadie se despierta un día, en pleno estado de abrasadora INDIGNACIÓN. En realidad, se va instalando gradualmente, cada vez que un fracaso tiene lugar en la vida de la persona. Pero el fracaso, puede tener dos consecuencias directas: o hace a la persona totalmente incapaz de reaccionar, debilitándola cada vez más, o intensifica su inconformismo, ¡elevándola a un estado de perfecta INDIGNACIÓN!
Cuando lo segundo acontece, entonces, ¡usted está preparado! “Pero, ¿preparado para qué?”, preguntarán muchos, ¡preparado para obtener la RESPUESTA tan esperada! Es inevitable, cuando nos indignamos, la RESPUESTA viene, pero para que ésta sea positiva, es decir, la esperada, usted tendrá que orientar el sentido de su propia INDIGNACIÓN.
En la Biblia, ¡la INDIGNACIÓN siempre fue dirigida por la FE!, un sentimiento tan volátil, o sea, tan difícil de controlar como es la INDIGNACIÓN, sólo podría ser “controlado” por algo aún más poderoso, que es la FE. La FE es la que dirige la INDIGNACIÓN que, consecuentemente, produce la RESPUESTA. Sin la FE sería imposible obtener la RESPUESTA deseada.
La INDIGNACIÓN nos hace valientes y la FE concentra la fuerza que nuestra propia INDIGNACIÓN produce. Es una verdadera guerra, entre nuestro “Yo” humano, débil, que se hace fuerte, empujado por la INDIGNACIÓN y orientado por la FE, contra el problema, para obtener la RESPUESTA.
¿Usted ya está preparado? Para eso, ¡basta con que esté total y completamente INDIGNADO!
“Preparaos para la guerra, despertad a los valientes; acérquense, suban todos los soldados. Forjad espadas de vuestras rejas de arado y lanzas de vuestras podaderas; diga el débil: Fuerte soy.” (Joel 3.9-10)
¡En el Centro de Ayuda UCKG, 232 Seven Sisters Road, Finsbury Park, N4 3NX!
Deixe um comentário