El suicidio es una realidad que impacta a todas las sociedades, afectando a individuos de diferentes orígenes, sexos, culturas, clases sociales y edades.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), al año se producen más muertes por suicidio que por enfermedades como el VIH, la malaria, el cáncer de mama, incluyendo guerras y homicidios.
Entre los jóvenes de 15 a 29 años, el suicidio ha sido la cuarta causa de muerte, siguiendo los accidentes de tránsito, la tuberculosis y la violencia interpersonal.
La última encuesta realizada por la OMS, en 2019, apunta a más de 700,000 suicidios en todo el mundo, sin contar los episodios no denunciados, lo que eleva esta estimación a más de 1 millón.
En el Reino Unido, los hombres tienen tres veces más probabilidades de morir por suicidio que las mujeres. En la República de Irlanda, la tasa es cuatro veces mayor entre los hombres que entre las mujeres.
Además, la prevalencia global de depresión y ansiedad aumentó en un 25 % al comienzo de la pandemia de Covid-19. Los jóvenes y las mujeres fueron los más afectados.
No tiene porque ser una estadística, creemos que es mejor prevenir que curar por eso cada viernes nuestros voluntarios del equipo de los Ángeles de la Noche se dedican a visitar varios puentes de Londres para atar notas de esperanza y prevenir intentos de suicidio.
Si necesita hablar con alguien con urgencia, puede llamar a nuestra línea de atención las 24 horas al 020 7686 6048 o a nuestro WhatsApp 07490 979661 donde habrá alguien disponible para hablar.
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