¿Materia máxima o felicidad máxima?

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¿Materia máxima o felicidad máxima?

¿Está tu armario repleto de ropa? ¿Están tus estanterías llenas de CDs, DVDs, libros y revistas, recuerdos de las vacaciones y cosas así? ¿Cómo está tu cajón de maquillaje? ¿Lleno hasta reventar, quizás? ¿Y la cocina? Con la máquina de café, la freidora, la arrocera, la panificadora, el procesador de alimentos, jarra eléctrica, cacerolas, sartenes, y todo lo demás ¿Tienes espacio para algo más?

Si la respuesta a algunas o a todas estas preguntas son afirmativas, entonces, probablemente hayas llegado a tu ‘materia máxima’ personal.

La razón por la que preguntamos es que el término máximo se ha difundido bastante en los primeros meses del 2017. Refleja el hecho de que el mundo occidental se aproxima a su máximo consumo y que nuestro deseo por más cosas materiales, por el producto o artilugios tecnológicos más avanzados, más innovadores y más modernos, se está agotando.

Los comentarios de los medios de comunicación acerca del tema oscilan entre el pensamiento de que, en el mundo en desarrollo, las personas todavía consideran que más productos de consumo realzará su felicidad y la idea de que la sustentabilidad se beneficiará si todos compramos menos, a pesar de que la economía sufrirá las consecuencias. También hay evidencias de que está aumentando el interés de las personas en reciclaje, en reusar y reparar lo que poseen. Y tiene sentido, sobre todo para aquellos que saben lo que es estar financieramente tenso.

Entonces, ¿dónde encaja la felicidad? Es muy obvio que una gran riqueza, y la máxima posesión de productos de lujo, no llevan automáticamente a la felicidad máxima. Está claro que lo contrario también es cierto. Los bienes materiales solo son parte del cuadro.

Una definición de la felicidad que ha permanecido en la prueba del tiempo es que es el resultado de lograr, durante el curso de toda una vida, todos los bienes, salud, riqueza, conocimiento, amigos, etc. que llevan a la perfección de la naturaleza humana y al enriquecimiento de la vida de uno. Para los cristianos, se debe incluir el vivir conforme a tu fe y las bendiciones que le das a los demás.

 

 

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