Bible study (Christian), God, la disciplina del Señor, propia voluntad,
“Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, puestos los ojos en Jesús, el Autor y Consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de Él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y Se sentó a la diestra del trono de Dios.
Considerad a aquel que sufrió tal contradicción de pecadores contra Sí Mismo, para que vuestro ánimo no se canse hasta desmayar.
Porque aún no habéis resistido hasta la sangre, combatiendo contra el pecado; y habéis ya olvidado la exhortación que como a hijos se os dirige, diciendo: Hijo mío, no menosprecies la disciplina del Señor, ni desmayes cuando eres reprendido por Él; porque el Señor al que ama, disciplina, y azota a todo el que recibe por hijo.” Hebreos 12:1-6
Estaba meditando en este texto y quedé maravillado con la forma en la que el Espíritu Santo habla.
– Delante de tan gran nube de testigos que tenemos a nuestro derredor, no podemos ignorar la acción del Espíritu Santo en nuestro medio;
– Es nuestra obligación despojarnos de todo peso (futilidades mundanas) y del pecado que tenazmente nos asedia impidiendo la gran visión de aquello que Dios quiere hacer en nuestras vidas;
– Corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante: la soberana vocación de los hijos del Altísimo;
– Pongamos los ojos en el Autor y Consumador de la fe, Jesús, para no cansarnos nunca (Visión Espiritual)
– Aquellos que no resistan al pecado hasta la sangre (sacrificio) de la propia voluntad, ciertamente todavía no han dado importancia a su Salvación;
– Por eso es necesaria la disciplina Divina. Dios nos disciplina para el aprovechamiento, a fin de que seamos participantes de Su Santidad. Hebreos 12:10
Dios los bendiga.
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