¿Quieres aprender las dos estrategias utilizadas por la serpiente contra Eva para hacerla pecar?
Esto te sirve de advertencia para que no hagas lo mismo o peor que ella.
El apóstol Pablo, escribiendo a los cristianos en Corinto, recordó lo sucedido en el Jardín del Edén, esto se repite cada vez que alguien comete el mismo error que Eva.
El mismo engaño que ocurrió en el Edén, por la boca de la serpiente (la primera estafa que ocurrió) sucede así todos los días en algún lugar del mundo y, tal vez, en tu propia vida.
“Pero temo que, así como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestras mentes sean desviadas de la sencillez y pureza de la devoción a Cristo.” (2 Corintios 11:3).
¿Cuál fue la estrategia del diablo para engañar a Eva? Utilizó dos estrategias. Primero, distorsionó la Palabra de Dios:
“Y la serpiente era más astuta que cualquiera de los animales del campo que el Señor Dios había hecho. Y dijo a la mujer: ¿Conque Dios os ha dicho: «No comeréis de ningún árbol del huerto»?” (Génesis 3:1).
La serpiente tiró el anzuelo, llamó la atención de forma generalizada y luego llegó al punto concreto. Y Eva cometió el error de entablar esa conversación:
“Y la mujer respondió a la serpiente: Del fruto de los árboles del huerto podemos comer; pero del fruto del árbol que está en medio del huerto, ha dicho Dios: «No comeréis de él, ni lo tocaréis, para que no muráis». (Génesis 3:2,3).
Entonces, la serpiente aplicó la estafa, cambiando la narrativa y poniendo otro significado a las palabras de Dios:
“La serpiente dijo a la mujer: Ciertamente no moriréis; Pues Dios sabe que el día que de él comáis, serán abiertos vuestros ojos y seréis como Dios, conociendo el bien y el mal.” (Génesis 3:4,5).
Es decir, despertó curiosidad dentro de la mujer. “¿Quieres decir que Dios nos está ocultando algo? ¡Eso no es justo! Quiero saber qué nos está ocultando”. Eva creyó la narrativa de la serpiente.
Primero: la serpiente distorsionó la Palabra de Dios. Segundo: le dio otro significado, otra narración a lo que Dios había dicho. Y así, la serpiente todavía trabaja hoy.
¿Cuántas personas han caído en palabras distorsionadas (incluso a través de la Biblia)? Vea que el diablo usó las palabras de Dios contra Dios. El diablo usó el Salmo 91 contra el Señor Jesús en el desierto.
Si la persona no piensa, cae en su historia. Por lo tanto, tenga cuidado de no tomar partes sueltas de las Escrituras y formarse opiniones equivocadas. En el Jardín, sólo la serpiente le habló a Eva. Pero hoy en día la serpiente está en muchos lugares.
Un ejemplo: “No necesito ir a la iglesia porque Dios está en todas partes”. Hay algo de verdad en esto (por eso es convincente). Dios realmente está en todas partes pero están omitiendo que fue Dios mismo quien creó la iglesia.
El mismo Hijo de Dios dijo: “Porque donde están dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.” (Mateo 18:20).
Fue Dios quien le dio al rey David los planos del Templo (1 Crónicas 28) y los discípulos de la primera iglesia se reunían regularmente (Hechos 2:42-46 y 20:7).
La fe no es lo que sientes; es lo que haces. Entonces, la persona piensa que debe irse si no está de acuerdo con algo en la iglesia pero no ve que la serpiente promueve la discordia para crear separaciones. Cuidado con las versiones de las historias que te llegan.
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