toda su vida, Un día de suerte,
Había una chica ciega que odiaba el hecho de haber nacido ciega. También odiaba a todo el mundo, excepto a su novio.
Un día, dijo que si pudiera ver el mundo se casaría con él. Un día de suerte, alguien le donó un par de córneas y luego su novio le preguntó, “ahora que me puedes ver, ¿te casas conmigo?”
La chica se quedó asombrada cuando vio que su novio era ciego. Le dijo “Lo siento muchísimo pero no puedo casarme contigo porque estás… ciego.”
Su novio dio un paso atrás y con lágrimas en sus ojos le dijo “Por favor, cuida bien de mis ojos. Eran lo mejor que tenía”
Nunca rechaces a aquellos que te aman. A veces, las personas sacrifican por nosotros y ni siquiera tenemos consideración por ellos. Jesús entregó toda su vida por nosotros, y aun así, la mayoría de las personas de este mundo Lo rechazan.
Obispo Macedo
www.bispomacedo.com.br/es
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