La Campaña de Israel

la promesa de Dios, para el último momento, para hacer la voluntad de Dios, una fe obediente a Dios,

1. ¿Qué es la campaña?

En términos generales, una campaña es una series de actitudes con la intención de lograr una meta en particular”. La palabra se usa normalmente para describir a las operaciones militares durante la guerra. En el sentido espiritual, una “campaña de fe” es un movimiento para superar un problema y/o tomar posesión de la promesa de Dios.

Durante una campaña, uno reune toda su fe, esfuerzos y recursos, y lanza un ataque sobre su problema con dedicación infatigable para alcanzar su meta. Palabras que expresan un significado similar incluyen ataque, impulsar, luchar, movimiento, operación, empujar, contienda, persecución y asalto.

2. ¿Qué es la Campaña de Israel en el Templo de Salomón? ¿Cual es su objetivo?

Es una mobilización de toda tu fe, esfuerzos y recursos para obtener del Señor lo que te falta en tu vida. Abraham tenía todo lo que quería pero le faltaba una cosa: un hijo. Por una fe obediente a Dios, obtuvo a ese hijo y mucho, mucho más. Él fue “bendecido en todas las cosas”. De Abram (un hombre frustrado sin hijos) se convirtió en “Abraham” (padre de muchas naciones).

El objetivo de esta campaña es ayudar a las personas para que cambien su vida totalmente; para acabar con su vergüenza y vencer la frustración por lo que les falta; para capacitarlos a tener una vida merecedora de vivir. Los obispos y los pastores que representan el UCKG por todo el mundo se reunirán en el Templo de Salomón en Brasil, para presentar vuestros pedidos de oración ante Dios sobre el altar del templo, el 12 de julio.

3. ¿Quién debería participar de esta campaña?

Cualquiera que se sienta de la misma manera que Abraham se sentía antes de que Dios cumpliera con Su promesa. Abraham era un hombre incompleto. Si te sientes incompleto porque te falta algo en tu vida, esta campaña es para ti.

4. ¿Quien no debería participar de esta campaña?

Cualquiera que tenga dudas en su corazón o no crea en las promesas de Dios; quien no esté dispuesto a obedecer o hacer Su voluntad hasta el punto de negar su propia voluntad; quien no esté listo para luchar y sacrificar para obtener su bendición, o sea, cualquiera que no tenga la fe de Abraham.

5. ¿Es garantizada? ¿serán todos bendecidos en esta campaña?

Para ser bendecido en esta campaña, debes estar en la misma fe que Abraham. Dios mismo dijo: “Mirad a Abraham, vuestro padre” (Isaías 51.2), en otras palabras, imita su fe; aprende de él; haz lo que él hizo.

Abraham fue un ejemplo de cómo obtener bendiciones por la fe. ¿Cuál era la característica principal de su fe? La fe de Abraham se basaba en una obediencia total a la voz de Dios y una creencia total en el cumplimiento de Sus promesas. Por lo tanto, la garantía de tu bendición está en la calidad de tu propia fe.

6. ¿Qué debería pedir y cuantos pedidos puedo enviar?

Deberías mirar qué es lo que te falta en tu vida, qué te hace sentir incompleto e insatisfecho. A Abraham le faltaba un hijo, y eso lo hacía sentir insatisfecho, un hombre frustrado. ¿Qué te falta que hace sentir insatisfecho/a? Ten una idea clara de lo qué es. Sé específico. Escríbelo detalladamente.

Puede que te falte una buena salud, o estás frustrado por tu situación financiera. Puede que te falte cumplir con tu vida sentimental o unidad familiar, pero lo más importante, mira tu vida espiritual. ¿Tienes la seguridad de tu salvación? ¿Te sientes cerca de Dios? ¿Naciste de Dios? ¿Te bautizaste con el Espíritu Santo? Siempre pon tu relación con Dios en primer lugar puesto que todo lo demás depende de ello.

Utiliza esta campaña, no solo para conseguir bendiciones físicas, pero sobretodo, para crecer y ser bendecido espiritualmente. Una vez que hayas definido lo que vas a pedir, escríbelo. Deberías traer la oración original contigo el 12 de julio, pero también deberías quedarte con una copia para luchar por esa bendición y tenerla siempre a la vista.

Con respeto a cuantas cosas puedes pedir, te aconsejamos que no pidas muchas cosas diferentes sino que mejor concéntrate en uno o dos pedidos solo (aparte de tu vida espiritual). Recuerda que normalmente cuando los problemas grandes de tu vida se resuelven, los pequeños se solucionan por sí solos.

7. ¿Qué debería hacer para participar de esta campaña?

Primero de todo, asegúrate de saber lo qué quieres de manera clara y específica.

Segundo, mira a ver si lo que quieres está de acuerdo con las promesas de Dios. Utiliza tu fe inteligente. En otras palabras, asegúrate de pedir algo que no sea un capricho sino algo que esté de acuerdo con la voluntad de Dios tal y como lo expresa en Su palabra.

Tercero, mira si estás preparado a hacer el sacrificio necesario para conseguirlo. Es aquí donde mucha gente falla.

Una campaña no es solo para escribir un pedido de oración, entregárselo al pastor y luego dejar que él haga el resto por ti. Tampoco es mágico. Una campaña exige tu colaboración total – cuerpo, alma y espíritu- como los que van a la guerra.

Todo lo bueno tiene un precio alto. Los sacrificios exigidos para lograr una bendición depende del tipo de bendición que buscas. Por ejemplo, los sacrificios que se exigen para comenzar un negocio son mucho mayores que aquellos que se exigen para encontrar un trabajo.

8. ¿Qué debo sacrificar?

Otra vez, el esfuerzo que tendrás que hacer para lograr algo varía conforme a lo que estás pidiendo. Los sacrificios exigen tiempo, esfuerzo, dedicación y determinación para luchar hasta obtener tu objetivo.

Sin embargo, hay unos ingredientes que deben ser incluidos en cada sacrificio perfecto. Son el negarse a uno mismo y la ofrenda sacrificial. En otras palabras, los sacrificios espirituales y financieros.

9. ¿Qué es negarse a sí mismo en un sacrificio espiritual?

Es negar tu propia voluntad para hacer la voluntad de Dios. Cuando te niegas a ti mismo, estás sacrificando los deseos de tu carne, los cuales se oponen a los de Dios, para agradarlo. Nadie debería esperar una respuesta de Dios cuando está viviendo deliberadamente una vida errada. Abraham vivió en obediencia a Dios, se negó a sí mismo totalmente.

Mira tu vida y a ver si has sido fiel y obediente a Dios, sin importar en qué.

“Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame.” (Mateo 16.24)

10. ¿Qué es el sacrificio financiero?

Es la materialización de tu fe. La fe es tan solo una teoría si no se materializa. Así como el cuerpo sin espíritu está muerto, también la fe sin obras está muerta (ver Santiago 2.26)

“¿No fue justificado por las obras Abraham nuestro padre cuando ofreció a Isaac su hijo sobre el altar?” (James 2.21)

Nuestras ofrendas son la prueba de nuestra fe. Cuando creo (tengo fe) en algo, estoy preparado a ponerlo en práctica con total seguridad de los resultados. ¿Por qué Abraham decidió obedecer a Dios y ofrecer a Isaac como sacrificio? Por su fe.

Tu sacrificio financiero es algo que perderás (dejarás de hacer o no comprarás en este momento) como demostración de tu gran fe en Dios.

11. ¿Cómo sé exactamente lo que es mi sacrificio?

Dios le dijo a Abraham, “Toma a tu hijo, tu único hijo Isaac, a quien amas…”

Pero fíjate que Isaac no era el único hijo de Abraham. También tenía a Ismael. ¿Por qué Dios no pidió a Ismael o dejó que Abraham eligiese uno de los dos? Porque Ismael no era lo mejor de Abraham, ni tampoco hubiera escogido a Isaac si tuviera que elegir. Ismael representa el sacrificio que no es aceptable, mientras que Isaac representa el sacrificio perfecto – el tesoro más preciado que tiene una persona.

Nuestro sacrificio es exactamente lo que no nos gustaría dar. Sabrás cual es tu sacrificio cuando el tan solo pensar en ello, te duele en tu corazón.

12. Participé de varias campañas anteriores. ¿Tengo que participar otra vez?

Cuando participas de una campaña correctamente, estás bendecido. Por lo tanto no es necesario que participes otra vez por lo mismo. Pero si tienes nuevos objetivos o te das cuenta que en campañas anteriores no participaste correctamente, entonces tienes una oportunidad de hacerlo bien esta vez.

Las campañas de la iglesia son oportunidades para ejercitar tu fe y obtener las promesas de Dios en tu vida. No estás obligado/a a participar.

13. ¿Cómo sé si estoy listo para esta campaña?

Abraham escuchó la voz de Dios y creyó. Su creencia y disposición para obedecer fue característica imprescindible para ser bendecido. Dios le dijo:

“por cuanto has hecho esto y no me has rehusado tu hijo, tu único, de cierto te bendeciré grandemente….” (Génesis 22.16-17)

Escuchar o leer acerca de esta campaña te ayudará a escuchar la voz de Dios en tu mente empujándote a seguir adelante para luchar por lo que quieres. Si te sientes con fe para responderle y actúas, entonces estás preparado.

14. ¿Y si no estoy preparado?

Entonces no participes. Es muy importante que no participes en la campaña porque otros lo estén haciendo o porque el pastor hable de ella en sus prédicas. Para participar debes tener tu propia fe. Debe ser algo entre tu y Dios – y nadie más. No deberías hacerlo con emoción ni con entusiasmo.

Tenemos cadenas de oración (página 13) en la iglesia para ayudarte con tus problemas diarios. Síguelas. Pero una campaña para cambiar tu vida drásticamente es algo muy serio y deberías unirte solo cuando hay un compromiso total.

Entonces, si sientes que no estás preparado/a, no deberías sentirte mal ni fuera de lugar. Simplemente ora para que Dios te ayude a tener la fe para participar de la campaña en el futuro.

15. Estoy preparado/a. ¿Qué hago ahora?

Deberías asistir a la iglesia lo más a menudo posible entre ahora y el 12 de julio. Esto es para que escuches lo que dice el Espíritu Santo en las reuniones de aquellos que están en la campaña. Te sugerimos, por lo menos, tres veces a la semana.

Lee en tu Biblia las escrituras acerca de Abraham y su fe, especialmente: Génesis a partir del capítulo 12 al 24, Romanos capítulo 4, Gálatas capítulo 3, Hebreos capítulo 11 y Santiago capítulo 2.

Escribe tu pedido de oración ya, no lo dejes para el último momento. Utiliza el papel que te dieron dentro del sobre. Acuérdate de hacer una copia para ti para que puedas recordarlo hasta que lo logres.

Examina tu vida espiritual ante Dios y asegúrate de estar en la fe. Permanece en espíritu de oración y concéntrate en tu objetivo. Dios te va a inspirar para que logres tu bendición incluso antes del día de la campaña. ¡Adelante y pon en práctica tu fe!. Recuerda que una campaña es orar y actuar, no orar y esperar.