La bendición de las 7 puertas de Jerusalén: La Puerta Nueva

New Gate

La Puerta Nueva se inauguró hace aproximadamente 130 años, se creó para facilitar el acceso a las murallas de la ciudad y su salida. Este cambio histórico nos enseña una valiosa lección: muchas puertas en la vida se abren al progreso, la novedad o la popularidad, pero no todas son beneficiosas.

Como seres humanos, somos naturalmente curiosos. Buscamos explorar lo desconocido, descubrir verdades ocultas y descubrir lo que se encuentra más allá de nuestra comprensión actual. La curiosidad ha impulsado innovaciones notables que han revolucionado nuestro mundo, desde la invención del avión hasta la bombilla y otros inventos revolucionarios. Muchos avances existen gracias a personas que se atrevieron a preguntar: “¿Es esto posible?”.

Sin embargo, si bien la curiosidad puede conducir al progreso, también puede traer destrucción. Es posible que hayas escuchado esta expresión  “La curiosidad mató al gato”. Este dicho existe porque la curiosidad sin límites puede conducir al daño. De manera similar, la curiosidad humana puede abrir puertas que nunca debieron abrirse.

Uno de los ejemplos más poderosos de esto se encuentra en la historia de Adán y Eva. La serpiente explotó la curiosidad de Eva para llevarla al pecado. Ella conversó con la serpiente, fijó sus ojos en el fruto prohibido y finalmente cedió a la tentación. Ese único acto de desobediencia abrió la puerta al pecado, trayendo sufrimiento a la humanidad.

Hoy en día, muchas personas caen en hábitos dañinos por pura curiosidad. Un amigo les presenta una nueva sustancia, comportamiento o estilo de vida, y antes de que se de cuenta, su curiosidad se ha convertido en su perdición.

En Apocalipsis 3:20, la palabra de Dios dice que Jesús está a la puerta y llama, esperando que lo dejemos entrar. Sin embargo, si ya hemos permitido que entren los malos hábitos, es posible que no quede lugar para Dios. La mejor manera de protegernos de la destrucción no es simplemente cerrar la puerta a la corrupción, sino negarnos a abrirla en primer lugar.

Si estás luchando con la tentación, sintiéndote atraído hacia algo que en el fondo sabes que no es bueno para ti, te invitamos a unirte a nosotros este domingo. Jesús mismo fue tentado en el desierto (Mateo 4:1-11), pero venció con la palabra de Dios. Tú también puedes vencer al recibir una palabra de fe. Tómate un momento para reflexionar sobre las puertas que hayas abierto y que hayan traído daño a tu vida. Escríbelas y trae tu lista este domingo. Ven y sé fortalecido, para que ningún camino que conduzca a la destrucción permanezca abierto en tu vida.

Evento: La bendición de las 7 Puertas de Jerusalén: La Puerta Nueva
Día y hora: Domingo a las 12:00h (también a las 8:30h y 18:00h)
Ubicación: En la Iglesia Universal