Patrick Clancy pidió al público que perdone a su esposa, acusada de estrangular hasta la muerte a los tres hijos pequeños de la pareja: Cora, de 5 años, Dawson, de 3, y Callan, de solo 8 meses.
Su esposa, Lindsay Clancy, de 32 años, estaba siendo tratada por depresión posparto y luego trató de suicidarse saltando por una ventana.
“Quiero pedirles a todos que encuentren dentro de sí mismos el perdón de Lindsay, como lo hice yo. La verdadera Lindsay amaba y nos cuidaba generosamente a todos: a mí, a nuestros hijos, a la familia, a los amigos y a sus pacientes. Las fibras de su alma son cariñosas. Todo lo que deseo para ella ahora es que de alguna manera pueda encontrar la paz”, pidió Patrick, en un comunicado a las personas que se sintieron conmovidas por la historia y están tratando de ayudarlo.
Aún frente a la triste situación de duelo en la que vive, Patricio encuentra la fuerza para hablar del amor que sentía por sus hijos y su esposa.
“Mi familia fue lo mejor que me ha pasado. Estaba muy orgulloso de ser el esposo de Lindsay y el padre de Cora, Dawson y Callan. Siempre recordé que cada día con ellos era un regalo nuevo”, dijo.
La historia de esta familia muestra el valor del perdón, que independientemente de los sentimientos es una elección consciente, que beneficia mucho más a quien perdona, liberándolo del dolor y del odio que corroe el alma.
“Y cuando estéis orando, perdonad si tenéis algo contra alguien, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone vuestras transgresiones.” (Marcos 11:25,26)
Si usted también necesita encontrar sanación para su alma, donde siente que necesita deshacerse del resentimiento, el dolor y la tristeza, le invitamos a participar en la ‘Semana de la Sanación del Alma’, del domingo 12 al domingo 19 de febrero, en la Iglesia Universal de Finsbury Park.
