El llamado del deber

acerca de la Biblia, fuera de la batalla, para el Reino de Dios, para salvar a otros,

 

Este no es un juego de consola. ¡Esto es Guerra! Aquellos que son salvos tienen un deber personal para salvar a otros. ¡Esta obligación no viene del pastor o del Obispo pero es algo que su fe exige!  Así como sus vidas fueron transformadas cuando conocieron al Señor Jesús, quieren lo mismo para otros.

Quieren esparcir el evangelio como fuego arrasador porque solo cuando los cautivos son puestos en libertad, el quebrado es restaurado, los enfermos sanan y el solitario está completo es que están satisfechos. Y no, no estoy hablando tan solo de los que predican en el altar, estoy hablando de TI.

Quizás, últimamente, has estado fuera de la batalla. Has estado en  RyR (Reposo y recuperación) pero ¡ahora es hora de acelerar y coger al enemigo por la fuerza!

Primera Misión: 13de mayo, Aceite del Salmo 23 a las 12h

Lugar: Reino Unido

Objetivo: Infiltra al enemigo. Salva almas. ¡Tu misión es no dejar a un solo hombre atrás! Esto es un fuego amistoso. ¡Esto es Guerra!

Equipo:

1. Reuniones de batallón – Los sábados a las 10h tu entrenamiento antes de desplegar al campo de batalla.
2. Camiseta del Aceite del Salmo 23 —Los civiles te reconocerán como los buenos.
3. Noticias de la ciudad — Tu munición, ¡no dejes que se te acabe! ¡Habla de ello, publícalo, haz lo que tengas que hacer!
4. Papelito del aceite — anota los nombres y los números de los civiles para llevarlos  al lugar seguro. No menores de 16 años.
5. El video clip — Recluta para el Reino de Dios. Abre tu carbonera (casa) para que tu comandante (pastor)  haga una reunión allí.

 

Hacer la Obra de Dios es deshacer las obras del diablo; ¡entonces el enemigo, Satanás, preparará una guerrilla para acabar contigo! Prepárate para sus tácticas.

1. Evita discutir con personas acerca de la Biblia. La persona con la que te encuentres, seguramente conoce la Biblia mejor que tu y te hablará de todo tipo de jergas religiosas para perder tu tiempo mientras que las personas necesitadas pasan de largo.
2. No te desanimes si las personas no quieren escucharte o si siempre dicen que “No”. Sigue adelante, encontrarás a alguien que quiere y necesita.
3. No trates de convertir a la persona en el momento; no tendrás éxito. Más bien, hazles pensar y deja que la persona se pregunte a ella misma. De esta manera, es más posible que lean el folleto que les diste.
4. Evita entrar en las tiendas para hablar con una persona. Al dueño de la tienda no le hará gracia que molestes a sus clientes ya que puede afectar su negocio.
5. No te distraigas hablando con tu compañero de guerra. Estás ahí para salvar almas, concéntrate.

¡Misión dada, misión cumplida! ¡Ajuu!

“Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.” (Marcos 16:15)

 

Ob. Celso Junior