áreas de su vida, un ciclo vicioso,
Algunos de nosotros nunca ganan nada en la vida, EN sorteos, bingos … pero eso no hace que dejemos de jugar, con la esperanza de que un día demos en el blanco y por fin, tengamos nuestra casa de ensueño, coche, vacaciones, familia, vida etc. Después de todo, aquellos que han ganado están viviendo el sueño, ¿verdad?
Los centros de apuestas están por todas las esquinas ahora y desde siempre, y no es de extrañar que la cantidad de apostadores haya aumentado en los últimos años. Todos quieren ganar en GRANDE como los pocos de los que hemos escuchado hablar, y este impulso se convierte en vicio, atrapando a la persona en un ciclo vicioso, puesto que la mayoría de los ganadores no desisten mientras están al frente, con el tiempo perdiéndolo todo. Otros se vuelven gastadores compulsivos perdiendo todo en unos años y regresando de vuelta a sus vidas como si nada hubiera pasado.
Evelyn Adams es una las “afortunadas” que no solo ganó la lotería una vez, sino dos veces, con solo un año de diferencia, pero, desafortunadamente gastó todos sus ganancias en Atlantic City y ahora vive en un camping para caravanas.
Muchos que fueron menos afortunados y no ganaron nada, desarrollan una serie de enfermedades mentales, tales como la depresión, ya que la esperanza de ganar los lleva abajo, la persona comienza a asociar el mismo resultado con otras áreas de su vida, tienden a dejar de creer en ellos mismos, pensando que su “mala suerte” se relaciona con todas las otras áreas de su vida.
Hay unos cuantos que han ganado y ahora están viviendo en mansiones en zonas ricas, pero también mencionan que son despreciados por sus vecinos. Una familia en particular reportó que planearon una fiesta en casa e invitaron a todos sus nuevos vecinos pero ninguno apareció, se negaron a asociarse con “dinero-fácil”
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