altar del sacrificio, áreas de su vida, la Gloria de Dios,
Después de 25 años de seguir a Dios obedientemente y de prosperar en todas las cosas, Dios apareció ante Abraham y le dijo:
“No temas, Abram, yo soy un escudo para ti; tu recompensa será muy grande.” (Génesis 15.1).
Como muchos que vienen a Dios, Abraham vio las bendiciones de Dios en otras áreas de su vida, pero todavía no había visto la respuesta de su problema inicial: todavía no tenía hijos.
Tenía el derecho de tomar a otra mujer, pero decidió serle fiel a su mujer estéril, Sarah. Todo lo que él quería era un hijo con su amada esposa.
Entonces, él le respondió a Dios: Oh Señor Dios, ¿qué me darás, puesto que yo estoy sin hijos, y el heredero de mi casa es Eliezer de Damasco?’” (Génesis 15.2)
La respuesta de Abraham demostró determinación. Se negó a desistir de su sueño, la promesa de Dios.
“Así que, los que son de fe son bendecidos como Abraham, el creyente.” (Gálatas 3.9)
Hay muchas personas que creen en la Biblia, aun así sus perfiles son terribles. En vez de mostrar la gloria de Dios, dicen: pobre, enfermo, débil, conformista, traidor, etc. ¡Esto hace que la iglesia de Jesús sea pobre!
¡Deja de ser un creyente que no utiliza su vida para demostrar que lo crees es verdad, que tu Dios es real! Por eso tuvimos el propósito de fe, la Campaña de Israel en el Templo de Salomón. Si no entiendes estos dos conceptos, estar indignado por el hecho de que todavía estas intentando resolver tu problema inicial y que eres un creyente que no tiene nada que demostrar, nunca te acercarás al altar del sacrificio.
Si lo opuesto es verdad y estás preparado para este sacrificio, todavía estás a tiempo ¿Cual es tu Isaac? Dios te pedirá algo específico así como hizo con Abraham… la pregunta es ¿Tienes el coraje de seguir los pasos de Abraham?
Ob Randal Brito
bishop@uckg.org
bprandalbrito.com
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