Cuarentena – Dia 4

El plan de Dios, el Reino de Dios, para satisfacer a Dios, plan de Dios, resultado de la promesa,

Chica“La cuarentena no es para aprender a hablar con las personas al respecto de la Palabra de Dios, sino para aprender a hacer una auto evaluación.” Viviane Freitas

“Y tendrás gozo y alegría, y muchos se regocijarán por su nacimientoPorque él será grande delante del Señor; no beberá ni vino ni licor, y será lleno del Espíritu Santo aun desde el vientre de su madre.” (Lc.1:14,15)

Una vez que el pedido de Zacarías no era para satisfacer sus propios placeres, Dios atendió su súplica, prometiéndole una alegría permanente y verdadera.

Pero no sólo eso… Como resultado de la justicia e integridad de Zacarías e Isabel, muchos otros tendrían también la oportunidad de regocijarse con el resultado de la promesa.

Cuando Dios actúa, trayendo la respuesta a alguien cuya entrega fue evidente, ¡Él opera algo sobrenatural! El plan de Dios no está limitado o pautado por el egoísmo – dirigido a un solo individuo…

Cuando Él opera, actúa de forma que abarca a muchos; ¡El plan de Dios es inconmensurable!

“Porque él será grande delante del Señor…”

No destacará apenas ante los ojos de los padres, familiares o amigos, ¡sino de Dios! Y así resguardarse de su propio “yo”…

No sería lleno de “si” mismo, sino separado de sus deseos “carnales”, para satisfacer a Dios.

“…y será lleno del Espíritu Santo…”

Cuando se refiere lleno del Espíritu Santo, se sobreentiende, menos de “mi misma”… Sobresaliendo así, más de Dios.

Cuando Dios responde y desciende sobre nosotros, Su intención es hacer que seamos “llenos” de Él. Nada de lo que nos ofrece es temporal o pasajero, como la alegría circunstancial.

Es algo eterno e inexplicable… Que ningún ser humano es capaz de suplir.

Y esa era la alegría de Zacarías: Un hijo que sería una inversión para el Reino de Dios. No para suplir sus necesidades personales o alcanzar un sueño, sino colocándose a disposición de Dios, permitió ser encuadrado en un plan de salvación más elevado.

Me gustaría que reflexiones en esto: ¿Tienes placer y alegría en lo que Dios te ha dado? ¿Has alegrado a muchos permitiendo que Dios te use?

… Es fácil leer y hablar de lo que sucedió en la Historia, pero ¿Y tu vida?

¿Has sido “grande” a los ojos de Dios; de tu egoísmo, o delante de los demás?

Y ¿Cómo podemos averiguar esto?

La respuesta compruébala en el próximo Post…

Vivi Freitas
www.vivifreitas.me/es

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