cada vez que tengamos un problema, Unas semanas más tarde, voluntad de Dios,
El otro día, una joven vino a hablar conmigo y estaba enfadada. Tenía problemas en el trabajo y se sentía perseguida. Ni siquiera había comenzado a contarme lo que sucedió cuando se le enmudecieron los ojos; estaba, sin duda, muy triste. Hablamos por largo rato, y, al final, se fue con una sonrisa en su rostro.
Unas semanas más tarde, la misma chica regresó y con otro problema y, así como con el primero, ¡sus ojos se llenaron de ríos de lágrimas!
Siempre que creas que todo el mundo está en contra tuya, cuando la persecución sea incesante, cuando tenemos la necesidad de llorar y llorar…
…¡el tan solo hacer la voluntad de Dios no es suficiente! Es cierto, no estoy loca.
¡Tienes que resistir!
Cada vez que lloramos, ¡el diablo se alegra! Es así, ¡él consigue lo que quiere!
En Santiago 4:7, está muy claro.
“Por tanto someteros a Dios. Resistid, pues, al diablo y huirá de vosotros.”
Si nos derrumbamos en vez de resistir cada vez que tengamos un problema, ¡el diablo hace una fiesta! Significa que el no huirá y no dejará de atormentarnos.
Utiliza tu fe, querida amiga. ¡Rechaza el llanto y sé fuerte! Golpea al diablo. ¡¡Ve las cosas a través de tus ojos espirituales y el huirá de ti!!
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