Ayuno de Daniel, el Espíritu de Dios, injusticias y pecados,
Hay dos tipos de personas en el mundo: los nacidos del mundo y los nacidos del Espíritu de Dios.
Los nacidos del mundo poseen el espíritu del mundo;
Los nacidos de Dios poseen el Espíritu de Dios.
Los hijos del mundo odian a los hijos de Dios porque son poseídos por el espíritu del mundo.
Jesús dijo: Si el mundo os odia, sabed que a Mí Me ha odiado antes que a vosotros. Juan 15:18
Ese odio solo existe porque son hijos del mundo, hijos de Satanás.
¿Es posible que los nacidos del Espíritu odien?
Pueden llegar a enojarse delante de las circunstancias, pero nunca, jamás y en tiempo ninguno odiar.
El odio cristiano se da solo en relación a las injusticias y pecados.
Nunca en relación a los seres humanos.
El odio a las personas solo existe a causa de la presencia de Satanás.
Aún siendo odiados por los hijos del mundo, lo que nos conforta es la certeza absoluta de que:
1º – No somos del mundo: Si fuerais del mundo, el mundo amaría lo suyo…
2º – Fuimos escogidos en el mundo por el Propio Señor Jesús. … pero porque no sois del mundo, antes Yo os elegí del mundo, por eso el mundo os odia. Juan 15:18-19
Solo los que tienen el Espíritu de Dios poseen la certeza de haber sido separados del mundo.
¡Esta es la propuesta para los 21 días del Ayuno de Daniel!
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