creer en Dios, nuestra relación con Dios,
Cuando hablamos de esta relación importante entre padres e hijos, simboliza nuestra relación con Dios.
Hay una gran presión sobre los padres para que proveen, y trabajan duro para cumplir (lo cual es bueno), pero eso no sustituye el hecho de que los niños están faltos de tiempo de calidad con sus padres.
A los niños de hoy en día les falta el amor fraternal. Se distraen con aparatos y artefactos, y crecerán hasta ser adultos y harán lo mismo. Y es así como el diablo se infiltra y destruye a la sociedad. Él espera pacientemente.
La fe que nace en un niño comienza con la creencia que tiene en sus padres. Los ejemplos y las enseñanzas edifican la confianza que el niño necesita para creer en sí mismo.
¿Pero cómo puede ocurrir esto si no tienen referencias paternales visibles?
El efecto dominó es que si ellos no creen en sí mismos, ¿Cómo pueden creer en Dios?
Aquí tienes algunos consejos para impulsar la relación entre padres e hijos:
1. Préstales atención;
2. Comparte tu fe en Dios con ellos;
3. Deja que te ayuden con los quehaceres de casa;
4. Juega con tus hijos;
5. Comer juntos a la mesa;
6. Respetad sus decisiones;
7. Prioritízalos en tu vida;
8. Escúchales cuando te hablan.
“Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón;y diligentemente las enseñarás a tus hijos, y hablarás de ellas cuando te sientes en tu casa y cuando andes por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes.” (Deutoronomio 6:6,7)
Obispo Randal Brito
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