disculpas a Dios, regresa de nuevo, una batalla espiritual,
La joven pasó por mi lado e inmediatamente giró su rostro… y ¿quien apareció de nuevo? La intrusa lanzándome inmediatamente el siguiente pensamiento: “Ella te odia. Mira como ella finge no verte”.
La intrusa está siempre atormentándome, desde la mañana hasta la noche, todos los días. Ella sólo me da un poco de paz cuando estoy demasiado ocupada como para darme cuenta de las cosas … pero siempre que estoy cerca de personas, sin yo captarla, ella se presenta.
Es una sensación horrible tener que decirme a misma que tenga buenos ojos, que no de importancia a cosas que no la tienen, que no invente cosas en mi cabeza, y evitar llegar a cada conclusión más absurda una que la otra. ¡Detesto caer en la trampa de la intrusa!
Todo el mundo pasa por eso, pero principalmente nosotras mujeres. Es una batalla espiritual, en la cual debemos estar siempre en guardia, preparadas para derrotar esos ojos malos.
Vi a Angelina Jolie en su más reciente película “Salt” y observe sus nuevas arrugas. Las amigas paran de hablar en el momento en que entras en la sala y la intrusa regresa de nuevo.
Es triste ver que tantas de nosotras tiene esa actitud interior. ¿De que sirve llevar un nuevo peinado el domingo por la mañana a la Iglesia, si todo lo que Dios ve es esa intrusa sentada en el mejor lugar de nuestras mentes?
Una manera que yo he conseguido librarme de esa naturaleza horrible es pedir disculpas a Dios, orar por la persona y hacer algo bueno por ella. Te digo, me siento tan bien haciendo eso, y creo que si yo continuo en este ritmo, inmediatamente esa intrusa no va a tener más libertad de aparecer cuando quiera.
cristianecardoso.com/es
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